SI NO FUERA POR ESTOS RATOS Y OTROS MÁS...

Cuando después de una semana movidita y cargada de pendientes (la lista es enorme y podría llegar a aburrirme incluso a mi) das por finalizado el viernes y a tu cabecita que muchas veces está en Ballobar (no pasaría nada porque todo el mundo supiera dónde está esta villa, nada tiene que ver con la luna de Valencia pero para el caso…) llega amplificada la famosa frasecita del historiador-docente, no me queda otra que pensar en lo afortunada que soy acercando la música a los más pequeños (vale, bien, a los alumnos de más de 40 los incluyo…:) )

LA HISTORIA DE LA MÚSICA A TRAVÉS DE LOS NIÑOS…Ahí queda eso. En realidad lo que queríamos hacer era una Audición de alumnos por aquello de mostrar el trabajo realizado, tocar delante de la family, perder el miedo escénico y bla, bla, bla..Hata ahí todo bien. pero liarla con disfrutar de un guió´n, conocer algo más que las notas de los músicos de peluca blanca, y de todos aquellos que bebieron de su genialidad ha sido toda una odisea…

El resultado…fantástico. Ellos, los niños, se han superado estos últimos días en poner sus dedos a tono, (principal objetivo), han buscado en el fondo de armario de casa para rechirar disfraces y complementos que pudieran caracterizar y hacer creíble su interpretación, Ha trabajado en equipo, han bailado, cantado, tocado…¿Miedo escénico? Yo no he visto. Solo he sentido alegría de la huerta en cada carica, en cada saludo, en cada interpretación…

LA HISTORIA DE LA MÚSICA A TRAVÉS DE LOS NIÑOS…ha llegado al público que por muy padres y madres que sean, tíos, tias, vecinos, amigos…(éxito asegurado) no deja de sorprenderme la cara de felicidad de la mayoría de los que allí ocupaban asientos. El auditorio del palacio de los Condes de la Ribagorza lucía el cartel de Completo. Y completa, completisima me siento yo al sentir la satisfacción de comprobar que los niños no solo cada vez lo hacen mejor sino que encima lo disfrutan. Tómate esa…

SI NO FUERA POR ESTOS RATOS Y OTROS MÁS...