“AVE MARÍA”
Estoy descansando en el paraíso.
A veces está mas cerca de lo que nos pensamos.
No tiene playa, pero tiene brazal.
No tiene palmeras, pero tiene carrascas.
No tiene self-service, pero tiene huerto.
No tiene luces de neón , pero tiene luna…
El campo de los abuelos lo tiene todo.
Está tan cerca de casa que tengo a todos cerca.
Esta mañana al despertar, me ha venido a visitar mi amiga
Pili, la restauradora.
Si , la que se fumó conmigo La Iliada (Capítulo 1).
Es un libro abierto. Sabe tanto…(Estos del arte son un poco
raros…)
Mientras le preparaba un café con leche (-¡menudo puchero!! me
ha dicho!) ella ha comenzado a hablarme de un tal Bosco. El Bosco. Un pintor
del siglo XV. Ella es así. Mira si no podría hablar de lo que habla todo el
mundo…
El Bosco…Hemos mirado su obra por internet ¡Excepcional!
Estoy atónita por la cercanía en el tiempo que denotan sus
pinturas.
Me encanta este loco.
Nos hemos enfrascado en una amena conversación, intentando
encontrar el modo y manera de llegar a
los niños y educarles en el arte, en el conocimiento, en el disfrute de la
mirada ante un clásico ya sea pintor, escultor o músico….
Y ha sido entonces cuando me he acordado de Alberto.
Mi querido alumno, Alberto.
Con 8 años, tocaba la flauta como los Angeles…
En su familia desayunan con John Coltrane, almuerzan con
Louis Armstron, comen con Miles Davis, meriendan con Billie Holiday y se acuestan con Charlie Parker.
Son geniales.
En esa casa se respira una cultura musical increíble.
Y ellos, los niños, la inhalan…
Por eso no me extrañó que aquél día en el que le llevé a
Alberto la partitura de “Ave María” de Schubert, el niño diera saltos de
alegría por el aula de música, mostrándose agradecido y feliz…
-¡El “Ave María”! El “Ave María”!
-¡Que gusto da!. Pensé yo, también feliz –Este es el fruto
de la buena educación.
Segundos después pensé:
-¡TIERRA TRAGAMEEE!
Alberto montaba la flauta travesera más contento que
chupillas al tiempo que cantaba:
-¡AVE MARÍA!¿CUANDO SERÁS MÍA?!!
(Termino la nota, reconociendo que gracias o a
pesar de Bisbal y de la coexistencia de todas las músicas, Alberto, años
después es UN GRAN MÚSICO)
|